Haendel: Alcina

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Ópera en tres actos con libreto anónimo basado en Orlando Furioso de Ariosto, estrenada por primera vez en Londres en 1735.

Espectáculo en italiano con subtítulos en francés e inglés.

 

Argumento

La historia transcurre en la isla de la hechicera Alcina.
Prólogo

El telón de fondo de la ópera proviene del poema Orlando Furioso. El heroico caballero Ruggiero está destinado a una vida breve pero gloriosa, y un benevolente mago siempre lo está sacando de los brazos de su amada, Bradamante. Bradamante no es el tipo que tolere la constante desaparición de su amante, y ella pasa grandes partes del poema en armadura integral yendo a buscarlo detrás de él. Justo antes de que la ópera empieza ella lo ha rescatado de un castillo encantado, sólo para que su caballo volador (un hipogrifo) le coja gusto a Ruggiero y se marche volando con él. Ruggiero y el hipogrifo aterrizan en una isla en medio del océano. Mientras el hipogrifo empieza a comer las hojas de un mirto, Ruggiero se sorprende al oír al arbusto que empieza a hablar. El arbusto revela que fue una vez un alma viva llamado Sir Astolfo, y la isla pertenece a las hermanas hechiceras Alcina y Morgana. La bella Alcina seduce a todos los caballeros que llegan a su isla, pero pronto se cansa de sus amantes y los transforma en piedras, animales, plantas, o cualquier otra cosa que se le ocurra. A pesar de la advertencia de Astolfo, Ruggiero sale al encuentro de la hechicera— y cae bajo su embrujo.


Acto I

Bradamante, amante de Ruggiero, lo está buscando, y llega a la isla de la hechicera Alcina con el anterior tutor de Ruggiero, Melisso. Vestida con armadura, Bradamante parece un joven y hace que le llamen por el nombre de su propio hermano, Ricciardo.

La primera persona a la que encuentran es a la hechicera Morgana. A duras penas humana y sin comprender el verdadero amor, ella inmediatamente abandona a su propio amante Oronte en favor del guapo 'Ricciardo.' Morgana los lleva a la corte de Alcina, donde Bradamante descubre que Ruggiero está perdidamente enamorado de Alcina y ha olvidado por completo su vida anterior.

 

Oronte descubre que Morgana se ha enamorado de 'Ricciardo,' y lo desafía a duelo, pero Morgana detiene la lucha. Oronte le dice al joven exactamente cómo trata Alcina a sus anteriores amantes y añade que, hasta donde él puede decirlo, Alcina se ha enamorado del recién llegado, 'Ricciardo'. Ruggiero está horrorizado y abruma a Alcina con su furia celosa. Las cosas empeoran cuando entra 'Ricciardo' y pretende admirar a Alcina. Alcina calma a Ruggiero, pero Bradamante está tan disgustada al ver a su prometido cortejado delante de ella misma que revela su verdadera identidad a Ruggiero. Melisso rápidamente la contradice y Ruggiero queda muy confundido.

 

Alcina le dice a Morgana que está planeando convertir a 'Ricciardo' en un animal, sólo para demostrar a Ruggiero cuánto le quiere a él. Morgana le ruega a 'Ricciardo' que se marche de la isla pero dice que prefiere quedarse, pues ama a otra. Morgana cree que esta otra persona es ella misma, y el acto finaliza con su triunfante aria "Tornami a vagheggiar."


Acto II

Melisso hace que Ruggiero recobre la razón gracias a un anillo mágico: bajo su influencia, Ruggiero ve la isla tal como es realmente, un desierto, habitado por monstruos. Asombrado, se da cuenta de que debe irse, y canta el famoso aria "Verdi prati" ("Verdes prados") donde admite que incluso sabiendo que la isla y Alcina son meras ilusiones, su belleza le perseguirá el resto de su vida.

Ruggiero, perplejo por la magia y la ilusión que lo rodea, no cree sus propios ojos cuando al final ve a Bradamante como ella misma, creyendo que ella puede ser otra de las ilusiones de Alcina. Bradamante está desesperada, lo mismo que Alcina. Convencida de la indiferencia de Ruggiero, entra para convertir a 'Ricciardo' en animal, y Ruggiero tiene que calmarse rápidamente y convencer a la maga de que él no necesita ninguna prueba de su amor.

 

Oronte se da cuenta de que 'Ricciardo', Melisso y Ruggiero tienen algún tipo de relación, Morgana y Alcina se dan cuenta de que están siendo engañadas, "Ah! mio cor! schernito sei!"("¡Ah, mi corazón está escarnecido!")pero es demasiado tarde porque los poderes de Alcina dependen de la ilusión y, al haber entrado en su vida el verdadero amor, ha perdido sus poderes.


Acto III

Morgana y Oronte intentan reconstruir su relación; ella vuelve a él y él la rechaza pero (una vez que ella ha abandonado el escenario) admite que la ama todavía. Bradamante y Ruggiero deciden que necesitan destruir la fuente de la magia de Alcina, normalmente representada como una urna. Alcina les ruega, pero Ruggiero es sordo a sus llamadas y rompe la urna. Al hacerlo, todo queda a la vez arruinado y restaurado. El palacio mágico de Alcina se derrumba y ella y Morgana se hunden en el suelo, pero los amantes de Alcina que habían sido transformados en rocas y animales, vuelven a ser ellos mismos.

Programa y reparto

CATEGORÍA VIP: Mejores asientos de la casa con un vaso de champán y programa de cortesía.

CATEGORÍA PRESTIGIO: Excelentes asientos con un vaso de champán y programa de cortesía.

 

Lisette Oropesa: Alcina

Gaëlle Arquez: Ruggiero

NN: Morgana

Teresa Iervolino: Bradamante

Philippe Talbot: Oronte

Guilhem Worms: Melisso

Samuel Mariño: Oberto

Les Épopées

Stéphane Fuget: Clavicémbalo y director

Palacio de Versalles

Versalles, símbolo de la monarquía triunfante, tuvo una función artística igual que política. Luís XIV reunió en su dominio a los artistas más brillantes de la época, y permitió la eclosión de nuevos estilos. Este marco, configurado por las artes, fue el escenario de las fiestas más fastuosas: Teatro, ópera, ballet, fuegos artificiales, espectáculos ecuestres, náuticos y banquetes se sucedían en la cumbre.

Fiel a su historia, el Palacio de Versalles sigue siendo el escenario de una vida cultural y artística muy variopinta: Grandes Aguas, óperas, conciertos, ballets, grandes espectáculos, serenatas, Gran baile de disfraces y exposiciones de arte contemporáneo. Artistas de gran renombre vuelven a insuflar la vida a los espacios más hermosos con creaciones clásicas y contemporáneas.
 

El Palacio de Versalles (en francés: Château de Versailles, castillo, mansión de Versailles) es un edificio que desempeñó las funciones de una residencia real en siglos pasados. El palacio está ubicado en el municipio deVersalles, en Île-de-France. Su construcción fue ordenada por Luis XIV, y constituye uno de los complejos arquitectónicos monárquicos más importantes de Europa.

 

Con sus tres palacios, sus jardines y su parque, Versalles es un dominio inmenso. Si bien Luis XIII hizo edificar allí un pabellón de caza con un jardín, Luis XIV es su verdadero creador, ya que le dio su amplitud y determinó su destino.

Luis XIV dejó París y decidió construir Versalles como una pequeña ciudad alejada de los problemas. Tendría varias etapas constructivas, marcadas por las amantes de Luis XIV.

 

El jardín de Versalles es clasicista, ordenado, racionalizado. Con el paisajismo se obliga a la circulación. Crea una organización que relaciona todas las esculturas y fuentes y ensalza la monarquía. Las esculturas se señalan unas a otras. Progresiva civilización del jardín: muy ordenado, podado y cuidado en la zona próxima al palacio, y después se va asilvestrando, es decir que se hace más silvestre a medida que nos alejamos del palacio.

Tres siglos después de su creación, el dominio sigue siendo considerable pues cuenta con 800 hectáreas, 20 km de caminos, 200 000 árboles, 35 km de canalizaciones, 11 hectáreas de techumbre, 2 153 ventanas y 67 escaleras.

El conjunto del palacio y parque de Versalles, incluyendo el Gran Trianón y el Pequeño Trianón, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1979.

Versalles vivió el apogeo de la Francia de los Borbones, pero también su destrucción: en Versalles se establecieron los Estados Generales desde 1789 hasta el 6 de octubre. En esta fecha, el palacio fue tomado por el pueblo y el rey y su familia obligados a trasladarse e instalarse en París. Desde entonces Versalles quedó vacío. En 1792, tras la caída de la monarquía, fue saqueado. Napoleón Bonaparte acarició durante un tiempo la idea de convertirlo en su palacio imperial, pero Versalles ya no se utilizará hasta el retorno de la monarquía. Luis Felipe encargó a su ministro Camille Bachasson, conde de Montalivet la conversión del palacio en museo: de esa época data la dedicatoria: "A todas las glorias de Francia".

Versalles ya sólo se utilizó de forma episódica o anecdótica. El palacio fue el cuartel general del ejército prusiano en 1870 durante el asedio de París. El emperador alemán fue coronado el 18 de enero de 1871 en la Galería de los Espejos. En él se refugiaron, durante la Comuna, Adolphe Thiers y su gobierno, sentándose en el gigantesco hemiciclo, en los sillones color burdeos hasta 1879. Después fue el centro de las elecciones presidenciales de la III y la IV República. Se decoró con grandes frescos que evocaban la guerra, la agricultura, el comercio, la industria y la paz. El Tratado de Versalles se firmó el 28 de junio de 1919, que puso fin a laPrimera Guerra Mundial.

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